El ejercicio ciudadano cívico-político-electoral del domingo 2 de junio durante el cual se alzó con el triunfo la Alianza de izquierda y centroizquierda conformada por el Movimiento de Regeneración Nacional (MORENA-4T), el Partido del Trabajo (PT) y el Partido Verde Ecologista de México (PVEM); resulta objetivamente, un indicador que confirma que un alto porcentaje de la población mexicana está convencida de que el camino de la Patria y Matria mexicana, de nuestro Estado-nación, no es el de la derecha con sus distintos matices.
Queda claro que las cúpulas de la derecha neoliberal-neofascista, de un tiempo para acá emparentados simbióticamente (asociación entre personas o entidades que se necesitan y benefician mutuamente) como PRIANRD, pensaron y creyeron que la reciente situación de Argentina con el ultraderechista Javier Milei; de Ecuador con el bisoño y arbitrario Daniel Noboa; o, en Perú, con la golpista Dina Boluarte –a cual más de raigambre conservadora y/o de derecha-, sin mayores esfuerzos, fácilmente podrían emularla en todo el territorio nacional.
Pero, ingenuos, ilusos y demasiado atrevidos u ocurrentes, se olvidaron que con el sistema cibernético actual (internet, YouTube, WhatsApp, redes sociales, IA…) millones y millones de seres humanos que habitan los cinco continentes del Globo Terráqueo, en minutos, en segundos, se informan, se enteran de los acontecimientos que se están presentando en cualesquier parte de América, África, Asia, Antártida, Europa y Oceanía.
A propósito, a estas alturas se tiene plena información de la grave crisis socio-económica que está sufriendo la población argentina desde que asumió la presidencia el ultraderechista Milei; los habitantes de Ecuador, con el neoliberal conservador Noboa. Y no se diga, los sufrimientos por los que está pasando el pueblo peruano desde el golpe militar encabezado por Dina Boluarte.
¿Dónde cree usted apreciado lector, que con esos casos y tantos penosos más que se han presentado por parte de la derecha en otros países de Latinoamérica y el Caribe, la ciudadanía mexicana, la población toda, va a permitir que eso se replique en nuestra Patria y Matria?
Por supuesto que no hay que confiarse y pensar que con los resultados electorales del 2 de junio, México está seguro, con suficiente fuerza y conciencia patriótica mexicana para enfrentar y detener esos y más intentos de la derecha al servicio de la oligarquía por volver a tener el control político-gubernamental de la República, de los EUM..
La derecha, los del prian, reconocen la victoria de MORENA. Pero eso no quiere decir, que hasta ahí llegó su lucha política-lectoral. ¡No, de ninguna manera! Tan es así, que cuasi esquizofrénicamente, ya está asegurando que van a impugnar los resultados del proceso electoral en referencia. Por lo pronto, están “exigiendo”, lo que en las elecciones del 2006, le rechazaron rotunda y burlescamente a AMLO: ‘que se cuente voto por voto en el 80% de las casillas’.
¡Ojalá, se realice ese recuento! Ya que al término del mismo, se habrá de corroborar la contundente victoria de MORENA, del régimen de la 4 T. Tal y como lo ha reconocido y ponderado a los votantes mexicanos, el excanciller chileno Heraldo Muñoz, jefe de la misión electoral de la OEA, al declarar que “las elecciones mexicanas se desarrollaron adecuadamente y con una alta afluencia”.
Ahora bien, esas conductas no son nuevas aquí ni en el resto del mundo, a esas y más estratagemas legaloides están acostumbrados y atenidos los partidos de la derecha. Por ejemplo, en estos momentos, “en el entorno político de Europa aparecen cada vez más las actitudes y los movimientos políticos vinculados con el radicalismo de derecha.
“El auge que despliegan hoy pone de relieve la confrontación que se advierte en el seno de la Unión Europea (UE); se prevé que esto se pondrá de manifiesto en las próximas elecciones del Parlamento, que se realizarán entre el 6 y 9 de junio, alterando su composición, su funcionamiento y la ruta futura de la UE.
“Los análisis de este fenómeno muestran los hechos y los factores asociados con el desenvolvimiento de los partidos de la derecha radical, así como su reforzamiento, el surgimiento de diversos entornos culturales, unos más abiertos que otros. Mientras algunos aparecen como resabios de movimientos fascistas, otros lo hacen como una mezcla, en ocasiones confusa, de propuestas de derecha, liberales y populistas, con las que se pretende ampliar el rango de su atractivo electoral.” (León Bendesky, “A la derecha”, La Jornada, Opinión, 3/6/24).
En ese marco: ¿qué puede esperarse de la derecha del estado de Chihuahua y de todo el país, con el probable regreso de Trump a la presidencia de los USA? ¿Integrarán frentes con mayor capacidad de acción e influencia política? ¿Intensificarán la violencia que siempre ha sido un componente abierto de la extensión de la derecha radical y de su penetración política y social?
Con respecto a los campos o flancos del espectro ideológico: IZQUIERDA y DERECHA algunos politólogos señalan que de origen esos términos se refirieron a una posición más que a una identidad, lo cual se remonta históricamente al periodo de la Revolución Francesa, donde en el parlamente aquellos sentados del lado derecho estaban en favor de la MONARQUÍA, mientras que quienes se sentaban a la izquierda se oponían a ella, lo que se convirtió en un posicionamiento político y les dio posteriormente un contenido ideológico más preciso.
En ese sentido, los investigadores vinculan la izquierda y la derecha con aspectos relacionados con la IGUALDAD o la ACEPTACIÓN de la DESIGUALDAD, respectivamente; con posicionamientos en favor o en contra del real CAMBIO social, económico y político; con la clase social dominante; con el papel del gobierno en la economía.
Importante el que se considere que los significados asignados a las etiquetas IZQUIERDA-DERECHA dentro de un sistema de partidos determinado, sobresalen porque estructuran las líneas de conflicto en una sociedad y, al conocer sus significados, brindan el panorama que muestra de dónde viene un país, un Estado-nación y hacia dónde se dirige política, económica y socialmente.
En ese mismo orden de ideas, se sostiene que en América Latina, desde el Río Bravo o ‘Grande’ hasta Argentina, la izquierda prefiere una mayor participación del Estado en la economía y posiciones en favor de la igualdad de género, de la diversidad sexual; en tanto que la derecha confía en los USA y los respectivos tratados comerciales, así como en la Iglesia católica y con posturas más duras sobre el combate a los grupos criminales.
No debe olvidarse que en Chihuahua, en todo el territorio nacional y en el resto del Planeta Tierra, históricamente los hombres y mujeres rechazaron y seguirán rechazando la esclavitud (física y mental), la discriminación de todo tipo, el clasismo, la voraz explotación de la fuerza de trabajo humana, la corrupción y la impunidad…
Las mexicanas y mexicanos bien nacidos, incluyendo los que por necesidad tuvieron que emigrar a los Estados Unidos o a otros países, se HARTARON DE ESO Y MÁS.