Ciudad de México.- Las medidas implementadas por Petróleos Mexicanos (Pemex) para frenar el robo de combustible han sido insuficientes.

En el primer semestre, Pemex registró pérdidas por 7 mil 650 millones de pesos derivadas del robo de hidrocarburos, un incremento de 33 por ciento respecto al mismo periodo del año pasado, de acuerdo con un análisis del Observatorio Ciudadano de Energía con base en los resultados financieros de la petrolera al primer semestre.

"Las pérdidas (en Pemex) por sustracción de combustible se incrementaron en mil 900 millones de pesos respecto a las registradas a junio de 2024, lo que representó un alza de 33 por ciento", señala el análisis elaborado por Francisco Barnés de Castro, integrante del Observatorio.

En el mismo periodo del año pasado, Pemex registró pérdidas por 5 mil 740 millones de pesos.

La pérdida por robo de combustible en el primer semestre de este año fue incluso mayor que en el mismo periodo de 2023, cuando ascendió a 5 mil 893 millones de pesos.

Pemex señala en su reporte financiero que sus operaciones están expuestas a riesgos derivados de conductas criminales como el robo, desvío o manipulación de petróleo crudo, gas natural y productos refinados del sistema de ductos.

Además, la empresa también enfrenta un mayor riesgo de robo de equipos y materiales.

"Estos actos incluyen la extracción ilegal de hidrocarburos mediante tomas clandestinas de ductos y el comercio ilegal de combustibles", agrega.

El reporte de la empresa petrolera señala que esta actividad delictiva ha derivado en incendios, explosiones, daños materiales y ambientales, lesiones y pérdida de vidas, así como en una reducción de ingresos por los productos robados.

"Las acciones implementadas en conjunto con el Gobierno federal para reducir el mercado ilícito de combustibles no han producido mejoras sostenidas en años recientes.

"En 2024 y 2023, Pemex descubrió 11 mil 774 y 14 mil 890 tomas ilícitas en ductos, respectivamente. Pemex está también expuesto a que algunos de sus empleados puedan estar, o pueda ser percibido que estén, participando en el mercado ilícito de combustibles", indica el reporte financiero.

Adicionalmente, la empresa petrolera reconoce que sus instalaciones están expuestas a actos intencionales de sabotaje, terrorismo, bloqueos y piratería internacional.

"Cualquier incidente relacionado con la producción, procesamiento y transporte de petróleo crudo y productos petrolíferos podría resultar en daños a personas, pérdida de vidas, daños ambientales, con los consecuentes gastos necesarios para la limpieza y reparación, daños a los equipos o las instalaciones de Pemex que, a su vez, podrían afectar al negocio, los resultados de operación y la situación financiera de la empresa", dice Pemex en su reporte.