Ciudad Juárez.- Aunque en esta partida de traslados del Cereso 3 a otros penales estatales por motivos de seguridad no se precisó la lista de reos que fueron reubicados, informes internos de la Secretaría de Seguridad Pública del Estado dieron cuenta del movimiento de Santos Nájera Ávila, presunto líder de “Artistas Asesinos”, grupo criminal al que pertenecían los 120 reos llevados a Chihuahua y Parral.

Santos, al igual que el resto de reos del área 1, donde estaba su pandilla, tenía su celda con cartón y triplay en las rejas, lo que hacía imposible ver hacia el interior, y se distinguía su lugar por una estrella negra pintada sobre la madera en la parte superior central, y era la única que la tenía.

Santos enfrenta dos penas por homicidio doloso y una por narcomenudeo, por las que respectivamente enfrenta 30 y 20 años, y otros 10 meses.

En septiembre de 2018, de acuerdo con el archivo periodístico de El Diario, fue encontrado culpable de haber asesinado a una menor de edad, por lo que se le condenó a 30 años de prisión.

Nájera Ávila fue condenado por el asesinato de Yosahadi Pérez Puerto, pues ella, presuntamente, vendía metanfetamina en cristal para un grupo delictivo contrario a los “Artistas Asesinos”.

En la acusación formulada por el Ministerio Público (MP) adscrito a la Fiscalía de Género en contra de Nájera, se señala que aproximadamente a las 10:00 de la noche del 7 de julio del 2016 él y un menor de edad privaron de la vida a Yosahadi en el interior de una tapia ubicada en la calle Bahía Blanca número 3225-47, del fraccionamiento Parajes del Sur, a golpes y mediante asfixia, para luego abandonar su cuerpo en un juego en forma de barco que estaba instalado en un parque del fraccionamiento Parajes del Sur. La causa de muerte de la menor fue asfixia por estrangulamiento con un lazo.

En mayo de ese año, un agente del Ministerio Público solicitó el sobreseimiento de una causa penal seguida en contra de Santos Nájera Ávila por el asesinato de Cruz Sigifredo Castillo y Omar Ruiz, quienes fueron privados de la vida el 5 de marzo del 2016 en el interior de una casa ubicada en la calle Paseo del Lago de la colonia Refugio de la Libertad.

En julio de 2018 fue condenado a 20 años de cárcel, pues fue identificado como quien junto a otra persona, manejó una camioneta tipo van de color blanco para ubicar a la víctima Eleazar Corral Arzabala, el cual fue agredido a tiros cuando se encontraba a bordo de su automotor, de acuerdo con informes de la Fiscalía General del Estado.

El ataque ocurrió el 9 de febrero de 2016 en el cruce de las calles Irma Ferriz de Reyes Estrada y Talamás Camandari.

El sentenciado y ahora trasladado al Cereso 1 de Aquiles Serdán junto con 89 reos más bajo un fuerte dispositivo de seguridad el pasado 29 de junio y madrugada del día 30, era señalado extraoficialmente como quien desde el interior del penal daba órdenes para la comisión de secuestros y homicidios. Al respecto, Gilberto Loya, secretario de Seguridad Pública del Estado, aseguró que “de momento estamos esperando las órdenes de aprehensión que pueda tener por parte de la Fiscalía General del Estado si existiera ese vínculo”.

Además de la clara violación al reglamento interior del penal con las tablas colocadas en las rejas de su celda, al interior se observó un pequeño altar a la llamada Santa Muerte, con una figura delgada de un esqueleto con túnica negra y una guadaña del mismo color que se le había caído a la figura pero le fue recargada para hacer parecer que mantenía unidad. En el altar se colocó un frasco con agua, una piedra circular, una figura de cerámica pequeña con forma de cráneo, una moneda y una piedra blanca en forma de corazón. También había ropa de colores no permitidos por el reglamento y diversos pares de tenis.