Cd. de México.- Para la Administración de Donald Trump el dominio del comercio chino fue la razón principal para iniciar una serie de medidas arancelarias contra todo el mundo, pero al implementar su plan tuvo que dar marcha atrás, debido a que China es uno de los principales proveedores a nivel global.
"No es posible prescindir de Asia (China), está estimado que para 2030 China va a proveer más del 53 por ciento de los productos intermedios de la manufactura mundial, hoy en día está en el orden del 35 por ciento, que es una cantidad enorme.
"Estados Unidos necesita de China para combatir la inflación que tiene, China es imprescindible para cualquier país del mundo por su capacidad manufacturera, y los más importante tiene investigación y desarrollo", explicó Rogelio González Achirica, director de la consultora One Stop Group.
Las cifras reflejan la importancia de los chinos como proveedores mundiales y EU no se libra de ello.
Si bien en el primer trimestre de 2025 Estados Unidos importó desde China 31 mil 821 millones de dólares, un 13.7 por ciento menos respecto a igual periodo del año anterior, de acuerdo con datos del Departamento de Comercio de EU, en sectores específicos los envíos desde China prácticamente mantienen su ritmo.
Por ejemplo, en el caso de la categoría de productos de tecnología avanzada Estados Unidos compró a los chinos 24 mil 546 millones de dólares, lo que representó un aumento de 5 por ciento.
Incluso en industrias como la automotriz, en la que México y Canadá son los principales proveedores de Estados Unidos, las empresas estadounidenses moderaron ligeramente sus compras a China pese a las presiones emitidas por Donald Trump.
En el primer trimestre de 2025 las importaciones desde China de autopartes, vehículos de pasajeros y camiones representó 4 mil 211 millones de dólares, 4 por ciento menos respecto al año pasado, todavía con Joe Biden en la Presidencia de Estados Unidos.
Para González Achirica, en medio de una serie de ajustes en las políticas arancelarias de Trump, China es el país que ha demostrado una "verdadera claridad" en sus decisiones, lo que ha incidido en que mantenga su dinamismo comercial incluso con las amenazas sobre los contenidos en las reglas de origen de Estados Unidos.
En una presentación la semana pasada, Carlos Elizondo, académico de la Escuela de Gobierno del Tec de Monterrey, acotó que la política de Donald Trump busca reconfigurar la política comercial para contener a China, pero al momento ya ha tenido que modificar sus iniciativas.
"En el camino de esta guerra comercial, el que pestañó primero en este choque, el que se echó para atrás fue Estados Unidos, porque es cierto que es cierto que el déficit comercial de China es muy grande, pero China controla cierto insumos clave para la industria de Estados Unidos", explicó Elizondo.