El exgobernador de Chihuahua César Duarte Jaquez regresó a la vida pública después de varios años de estar alejado de los reflectores. Circulan en las redes videos, que ya se han vuelto virales, en donde se le ve eufórico bailando y sacando sus mejores pasos en un concurrido antro, así como en su residencia de la capital del estado. Atrás quedaron las imágenes del parralense postrado en camas de hospital durante esa reclusión que el Duartismo consideró como una venganza personal del también ex gobernador Javier Corral. Pero los tiempos han cambiado y la suerte de Duarte Jáquez parece haber dado un giro favorable.
En días recientes se le ha visto dando entrevistas en diversos medios del centro del país y no ha tenido el menor recato en sus declaraciones en contra de su sucesor en la gubernatura. De enfermo, corrupto, inepto, traidor y prófugo de la justicia no baja Duarte al ahora senador Corral en todas sus declaraciones. Quien también presidió la Cámara de diputados se jacta de ser bien recibido en su estado a su regreso a la vida pública. A diferencia de Corral que ha recibido múltiples agresiones en cuanto pone un pie en el estado que con tanto desgano y desatino gobernó.
El motivo del júbilo que embarga a Duarte, es derivado de que un juez de Estados Unidos desestimó los cargos en su contra presentados por su presunta relación en las actividades de lavado de dinero y enriquecimiento con recursos de procedencia ilícita. Estas acusaciones fueron presentadas en su momento por el Gobierno de Chihuahua, según publicó Javier Corral.
El juez determinó que no fueron presentadas pruebas suficientes acerca de la compra, por parte de Duarte, de 50 propiedades en territorio estadounidense.
Por su parte, el exgobernador de Chihuahua, Javier Corral Jurado, difundió un video en sus redes sociales en el que acusa a la actual mandataria estatal, María Eugenia Campos Galván, de ser cómplice en la liberación y reintegración de bienes del exgobernador César Duarte Jáquez, a quien calificó como “el más grande ladrón en la historia de Chihuahua”.
Corral asegura que la libertad de Duarte y la recuperación de propiedades que le fueron incautadas durante su Administración no son resultado de su inocencia, sino de una “red de complicidades” liderada por Campos.
El exmandatario señaló que, durante su periodo como Gobernador de Chihuahua (2016-2021), se presentaron pruebas contundentes contra Duarte, incluyendo 21 órdenes de aprehensión por presuntos actos de corrupción, peculado y enriquecimiento ilícito. Sin embargo, Corral denunció que el Gobierno de Campos no ha proporcionado la documentación necesaria para sustentar los casos en instancias internacionales, como el juicio en Estados Unidos por la adquisición de 50 propiedades valuadas en 25 millones de dólares, lo que permitió la absolución de Duarte en ese país.
Duarte Jáquez a su vez calificó el fallo del juez estadounidense como histórico y lo consideró un “tiro de gracia” a la llamada "Operación Justicia para Chihuahua " encabezada por Javier Corral para, según él, perseguir políticamente a sus adversarios.
"Javier Corral no puede culpar a nadie de este resultado. No pudieron mentirle a la Corte de los Estados Unidos, ni presionarla, y en cinco años no pudieron probar sus acusaciones de corrupción, lavado de dinero, asociación delictuosa, ni desvío de dinero público para la compra de 50 propiedades”, expresó Duarte tras el fallo en el tribunal texano.
El futuro político del parralense César Duarte Jáquez todavía se ve incierto, sin embargo su presente se sigue despejando de amenazantes tormentas. Por lo pronto es tan evidente su júbilo por este triunfo en tribunales que hasta brillo le sacó a la pista de baile.