Chihuahua, Chih.- Durante los primeros días del mes de noviembre, la Fiscalía General del Estado (FGE), ha reportado la desaparición de un niño y dos adolescentes.
La víctima más pequeña es Ángel Alexander Celis Luján de 10 años y quien fue visto por última vez el día cinco en el albergue Palabra de Vida A.C.
De acuerdo con la pesquisa de este menor de edad, es originario de Veracruz, mide 150 centímetros, es de tez trigueña clara, es de complexión delgada, cara alargada, nariz recta y boca grande.
El día de su ausencia, Ángel traía consigo una chamarra en color verde y un pantalón de mezclilla.
Kevin Damián González Corral de 12 años también desapareció ese mismo día del mismo lugar; es de complexión trigueña oscura, cabello negro, rebelde, abundante, ojos café oscuros, cara ovalada, nariz convexa y boca chica.
La última vez que fue visto vestía chamarra color negro con rojo y un pantalón negro.
La tercera es Fernanda Guadalupe Quezada Baca de 16 años de quien no hay información desde el pasado 5 de octubre y por quien las autoridades activaron la Alerta Amber.
De acuerdo con el reporte, la víctima tiene el cabello lacio, rubio, tiene el color de ojos castaños, mide un 1 metro con 59 centímetros, pesa 40 kilogramos y como señas particulares tiene un lunar del lado izquierdo de la nariz y una cicatriz en el antebrazo izquierdo.
El resumen de los hechos señala que fue vista por última vez en la colonia Residencial Cumbres III.
En caso de contar con información de esta persona y/o de los otros menores de edad, pueden comunicarse al 911 y/o al 089 o bien al 5553462516.
La Alerta Amber es una herramienta eficaz de difusión, que contribuye en la búsqueda, localización y recuperación de niñas, niños y adolescentes, que estén en riesgo inminente de sufrir daño grave por motivo de su no localización o cualquier circunstancia donde presuman la comisión de algún delito ocurrido en territorio nacional.
Es independiente de la denuncia o proceso penal que inicien las autoridades competentes.
Cada entidad federativa cuenta con una Coordinación Estatal de Alerta AMBER, que está a cargo de la persona que designe el titular de la Fiscalía o Procuraduría General de Justicia de cada estado; quien valora la pertinencia de la activación de una alerta y en su caso, procede a la activación dentro de su territorio.