Chihuahua, Chih.- Residentes de anestesiología del Hospital Central denunciaron malos tratos y acoso por parte de la doctora titular de dicha especialidad, Karla Díaz Renova, a quien señalan por agresiones verbales y de dar de baja a tres de los seis médicos que tenía bajo su tutela.
Una de las afectadas, que quiso mantener su nombre en el anonimato, manifestó que, aunque desde el inicio de la residencia percibió algunas malas actitudes, fue en septiembre del año pasado cuando se presentaron las muestras de maltrato más graves.
Manifestó que, desde el 28 de agosto, ella se encontraba bajo tratamiento médico ya que atravesaba un cuadro de depresión, lo cual también afectó su rendimiento. A pesar de esta situación, expuso la afectada, la doctora Díaz la agredió verbalmente a gritos mientras estaba frente a un paciente en septiembre.
Ella u otros dos residentes fueron dados de bajo; en su caso le faltaron tres décimas para alcanzar la calificación aprobatoria. Aunque reconoció que su estado emocional y la medicación tuvieron repercusiones en su capacidad para completar el curso, también consideró que la doctora hizo poco por apoyarlos.
A decir de los residentes afectados, la mayoría de los titulares de las especialidades tratan de ayudar a los médicos a su cargo, sin embargo no ven esta misma actitud con la doctora Díaz.
Aunado a esto, consideraron que la doctora tenía trato diferenciado con los residentes, pues mientras los afectados no recibieron respaldo de su parte, en otros casos sí llegó a ayudar a compañeros que habían reprobado.
Aclararon que la doctora les dio la oportunidad de presentar un examen extraordinario, sin embargo, en uno de los casos, una confusión a la hora de comunicar la fecha de aplicación lo que impidió que llegar a tiempo a presentarlo.
Según lo narrado, tras la agresión verbal, la residente acudió a la Jefatura de Enseñanza donde dio a conocer lo ocurrido, sin embargo, no presentó una queja por escrito por temor a represalias, por lo cual no tomaron en cuenta su denuncia.
La titular de la Jefatura de Enseñanza la canalizó a la Universidad Autónoma de Chihuahua (UACh), específicamente con el doctor Said Alejandro de la Cruz Rey, secretario de Investigación y Posgrado de la Facultad de Medicina.
Ella acudió junto con otra compañera que también tuvo problemas con la doctora y reprobó por muy poco margen; aunque intentaron exponerle lo ocurrido encontraron una actitud muy cerrada de su parte.
Los afectados también fueron al Órgano Interno de Control (OIC) y el Comité de Ética del Instituto Chihuahuense de la Salud (Ichisal) que sigue con las investigaciones del caso.
De igual manera acudieron a la Comisión Estatal de los Derechos Humanos (CEDH) donde también radicaron una queja.
Ante la falta de apoyo institucional, los residentes hicieron un llamado para que alguien atienda su situación, pues lo que han pasado los afecta laboral y emocionalmente.
“Estamos cansados y decepcionados de un sistema que no nos protege”, señalaron, al tiempo que urgieron a que den respuesta a sus demandas.