Ciudad Juárez, Chih.- Hoy se cumplen 35 días del cierre gubernamental en los Estados Unidos, empatando así con el más prolongado en la historia de ese país, ocurrido entre diciembre de 2018 y enero de 2019, durante la primera administración del presidente Donald Trump.

El cierre ha comenzado a generar efectos visibles tanto en la economía estadounidense como en las decisiones financieras, al paralizar a miles de empleados federales y suspender servicios públicos esenciales que empiezan a afectar la operación diaria.

Alejandro Sandoval Murillo, presidente del Instituto Mexicano de Ejecutivos en Finanzas (IMEF), advirtió que incluso la calidad de los datos económicos comienza a deteriorarse ante la falta de operación, avivando la incertidumbre.

“En análisis económico, el problema más delicado lo trató Jerome Powell cuando hablaron de la falta de datos, porque las unidades de estadísticas tampoco operan y se degrada la calidad de los datos con los que se toman las decisiones”, manifestó.

El cierre, resultado de la falta de acuerdo presupuestal en el Congreso estadounidense, mantiene en pausa a diversas agencias federales, afectando la recopilación de información económica, impactando en las resoluciones de los inversionistas.

“En cuanto a servicios, hay varios que no se están llevando a cabo en la Unión Americana y ralentiza decisiones, por ejemplo, inversión, emisiones de apostillas, cosas de ese tipo, que luego se requieren para abrir una empresa y eso tiene impacto acá”, acotó.

Indicó que el asunto empieza a ser crítico, especialmente para los norteamericanos. Por otro lado, agregó, el Gobierno ha tomado determinaciones de presión política y habrá que ver quién cede más, pero lo cierto es que son consecuencias de normativas.

“Son consecuencias de normativas jurídicas estructuradas donde no necesariamente se da una conveniencia poblacional, o sea, en México, por ejemplo, eso no puede pasar (…) Dejar al país en vilo realmente es muy negligente (de EU)”, subrayó.

Mientras no se logre un acuerdo político, prevalece la probabilidad de que la parálisis extienda sus efectos hacia países estrechamente vinculados, como México, que dependen del flujo constante de información, inversión y trámites transfronterizos.

“En análisis económico, el problema más delicado lo trató Jerome Powell cuando hablaron de la falta de datos, porque las unidades de estadísticas tampoco operan y se degrada la calidad de los datos con los que se toman las decisiones”

Alejandro Sandoval Murillo

Presidente del Instituto Mexicano de Ejecutivos en Finanzas