Cd. de México.- En la empresa que nació hace 80 años entre hornos y harina en Santa María la Rivera para consolidarse como el conglomerado panadero más grande del mundo, Roberto Servitje Sendra fue parte fundamental de su inicio.
Nacido en 1928 en la Ciudad de México, desde los 17 años Roberto Servitje Sendra comenzó a operar en la recién nacida empresa panadera de la familia, desempeñando el cargo de supervisor de ventas, para posteriormente crear y dirigir el departamento de vehículos, unos de los pilares en la operación de la empresa que, además de fabricar la mercancía, se encarga de la distribución directa en los puntos de venta.
Así, en 1947, la empresa comenzó a estructurar su flotilla repartidora, la cual a la fecha se compone por más de 7 mil 750 unidades. Para esta actividad, parte fundamental fue su afición a la mecánica y su experiencia como piloto, al sumar más de mil horas de vuelo.
En la década de los 50, el hermano menor de Lorenzo Servitje se hizo cargo de la operación de la región de Occidente, donde consolidó la apertura de los mercados de León y San Luis Potosí, esta última ubicación donde comenzó otra planta panificadora para el Grupo.
Hacia 1979, Roberto asumió la dirección general del Grupo y a partir de 1994 también se hizo cargo de la presidencia del Consejo de Administración.
Bajo su dirección Bimbo sumó tres empresas, acumuló 12 panaderías y ya contaba con 15 mil colaboradores, lo cual fue la base para consolidar en 1986 el conglomerado.
Ya como presidente del Grupo, en 1995, Roberto Servitje adquirió la marca Coronado, al tiempo que expandió la producción a Chile y Argentina.