Para dolor de cabeza y de corazón de los más empedernidos elitistas dentro de los partidos de oposición a la Cuarta Transformación, este pasado miércoles una noticia que debió haber estado en las principales publicaciones de los medios de comunicación, se destacó que durante el gobierno del ex presidente Andrés Manuel López Obrador un importante porcentaje de la población mexicana que vivía en condiciones de pobreza, salieron de esa condición gracias a las políticas de la 4T, pese a quien le pese.
Y es que es importante para nuestro movimiento, que esta información se destaque, se cante y se presuma, porque desde los inicios de este movimiento y en sus bases como principio del proyecto alternativo de nación, impulsar las políticas públicas para mejorar las condiciones de vida de los mexicanos y principalmente buscar el beneficio de las mayorías que en el México del neoliberalismo dejó a casi de la mitad de la población en una situación de pobreza.
Entonces se trata de una realidad aplastante sobre los objetivos que la 4T se planteó en su fundación y una máxima de AMLO, “primero los pobres”, que inicialmente se le atacó por, según la oposición, atraer a las masas empobrecidas, (por ellos mismos), con un discurso al que calificaron de “populista”, luego en 2018 cuando empezaron las políticas de la transformación, la oposición cambió su narrativa del “populismo” a, “nos confrontan entre mexicanos”, dolidos de que iniciaban los apoyos directos a los mexicanos.

Los datos duros destrozan la verborrea del prianismo, tan solo es recordar que en 2018 cuando finalmente salió Enrique Peña Nieto, había en México 51.9 millones de mexicanos en condiciones de pobreza, un 41 por ciento de la población abandonada por los gobierno del PRIAN, que se dieron a la tarea de hacer negocios privados con los recursos públicos, privatizar todo lo que se pudiera y de entregar la soberanía económica a intereses extranjeros, la actividad macro era lo único que crecía, pero abajo la población carecía de todo, incluso de servicios básicos, e insisto, eran más de 51 millones de mexicanos en estas condiciones.
Fue el INEGI de donde salen los últimos datos de medición de pobreza en México, donde se destacó que 13.4 millones de personas salieron de la pobreza entre 2018 y 2014, periodo que comprendió la administración del ex presidente Andrés Manuel López Obrador, se trata de que actualmente en México hay 38.5 millones de personas en la situación de pobreza, (aún son muchos), sin embargo en necesario recordar que en 2018, en el final del prianismo, eran 51.9 millones, y sobre todo, que durante más de 30 años en estos gobiernos jamás se pudo anunciar una reducción de la pobreza, por el contrario, las condiciones de pobreza se incrementaban sexenio tras sexenio.
La estimación del INEGI se realizó con una metodología que contempla no solo los ingresos económicos, sino también el acceso a los derechos sociales como la vivienda y los servicios de salud, educación y alimentación, lo que se considera como “pobreza multidimensional”.
Otro dato importante es la disminución de personas en condiciones de pobreza extrema, esa condición más dolorosa donde las dificultades geográficas, regionales y culturales no permiten que se pueda acceder en auxilio social y que debería enfocarse el gobierno de la presidenta Claudia Sheinbaum, sin embargo esta condición también tuvo una disminución, a pesar de las dificultades, se trata de una reducción de 8.7 millones en 2018, a 7 millones de personas en 2024.
Y para los incrédulos y negacionistas de los logros de la 4T, es importante mencionar que esta disminución de pobreza y pobreza extrema, donde aún existe mucho por hacer, se lograron gracias a los programas de bienestar, que han permitido que millones de personas tengan un ingreso con el cual poder alimentarse 3 veces al día y poder subsanar gastos en servicios, acceso a educación, ingresos a mujeres trabajadores y madres solteras, a personas con discapacidad, pero también se ha destacado el importante aumento al salario mínimo, lo que también ha ocasionado un flujo continuo en el mercado interno, la economía interna reforzada, incluso en la pandemia, tengan para que aprendan.