El Gobierno federal entregó a Estados Unidos a un presunto miembro del Cártel de Sinaloa, identificado como Marco Antonio López Guerrero, por su presunto vínculo con tráfico de metanfetaminas y de armas.

A través de un comunicado, el Departamento de Justicia estadounidense señaló que los cargos del detenido podrían sumar hasta 40 años de cárcel.

"Marco Antonio López Guerrero, presunto traficante de metanfetamina con base en Mexicali y vinculado al Cártel de Sinaloa, fue extraditado de México el 24 de octubre para enfrentar cargos por drogas y armas de fuego", precisa el escrito.

Según las autoridades, López utilizaba mujeres jóvenes para el traspaso de metanfetaminas a través de los pasos peatonales del sur de California, y que llegaban hasta ciudades como San Diego y San Bernardino, entre otras.

"López Guerrero también utilizó una aeronave ultraligera para el trasiego de metanfetamina; y contrabandeó armas a México, incluyendo al menos un rifle AR-15 de cañón corto sin número de serie y más de 150 cartuchos de munición", añadió.

La investigación que condujo a la captura de López, señaló, resultó en el aseguramiento de más de 180 kilogramos de metanfetamina, 19 kilogramos de fentanilo, 2 kilogramos de heroína, así como armas y municiones.

El detenido de 34 años se declaró no culpable durante una audiencia del pasado 27 de octubre, y se prevé que su siguiente comparecencia sea el 21 del mes corriente ante la jueza Jinsook Ohta.