La Universidad Autónoma de Chihuahua (UACH) precisó a través de su área jurídica que si bien por años ha sido solidaria para aportar recursos al Fideicomiso Compensatorio de Jubilaciones del Personal, no está dentro de sus responsabilidades financieras darle solvencia, ya que es un organismo creado por el sindicato y depende de su administración.
De acuerdo con los registros de la universidad, el STSUACH constituyó en 1994 un fideicomiso para el manejo del Fondo Complementario de Pensiones, las reglas de operación fueron establecidas por el propio sindicato, en virtud de ser un beneficio “complementario” a la pensión y/o jubilación, el cual no es una prestación laboral de la Universidad, es por ello que no tiene una participación en el manejo de los recursos del fondo ni en sus reglas de operación.
El 10 de noviembre trabajadores y jubilados de UACH realizaron una manifestación exigiendo el cumplimiento de la cláusula 75, inciso R, del contrato colectivo, que establece una pensión dinámica equiparable al aumento salarial de los trabajadores activos.
Explicaron que la universidad otorgó aumentos de entre el 6% y 22% a los trabajadores activos, mientras que los jubilados recibieron solo un 4%, afectando a 348 pensionados. La protesta fue apoyada por el sindicato administrativo y su secretaria general, Aurora Rodríguez.
Respecto a la situación, el área jurídica de la universidad precisó que la federación consciente de la fragilidad de los sistemas pensionarios de algunas instituciones de educación, otorgaba anualmente una aportación económica para apoyo a los fondos de pensiones de los sindicatos de las universidades, no obstante, dejó de hacerlo desde hace más de 6 años.
Destacó que la UACH en solidaridad con sus sindicatos, pese a no ser una obligación establecida en la ley ni en los contratos colectivos hizo un extraordinario esfuerzo y continúo, en la medida de sus posibilidades, aportando económicamente al fondo de ambos sindicatos.
Hace más de 10 años la universidad en apoyo a los sindicatos y previendo la futura insolvencia de los fondos, apoyó con la dictaminación económica de éstos, informó la necesidad imperante de reformar las reglas de operación de los fondos administrados por medio de los fideicomisos, reformas que ha a la fecha han negado a realizar el STSUACH, causando con ello la inviabilidad económica del fideicomiso que administran.