Ciudad Juárez.- Más de 100 cuerpos son los acumulados en los cuartos supuestamente refrigerantes de un crematorio utilizado presuntamente por las funerarias Plenitud, Luz Divina y Amor Eterno que está ubicado en la colonia Granjas Polo Gamboa, de acuerdo con información extraoficial.

El Diario buscó la versión de estas empresas sin obtener una respuesta hasta el cierre de esta edición.

Lo que encontraron las autoridades parecen imágenes de una película de terror. Los cuerpos fueron hallados apilados en una habitación uno encima del otro sin ningún mueble de separación, vestidos con ropa desde pijamas rosas hasta sólo cobijas, e inclusive fueron observados cuerpos en estado de descomposición, con la piel colgante y piernas y rostros en reducción esquelética.

En la entrada de la habitación el suelo de cerámica sólo era visible en la estela de apertura de la puerta, pues al centímetro siguiente se acumulaba materia orgánica.

La Comisión Estatal de Protección contra Riesgos Sanitarios aseguró que con este hallazgo, a partir de una llamada al 9-1-1, se descubrió una capacidad limitada del horno crematorio, 60 cadáveres embalsamados acumulados y cuartos sin la refrigeración para su almacenamiento, por lo que fue suspendido el inmueble que contaba con permiso de la Comisión desde 2016.

El lugar fue resguardado desde la noche del jueves, luego de que vecinos reportaron a la Policía Municipal que entró ahí una carroza fúnebre con un cuerpo, y tras la intervención de los uniformados se localizaron 60 cuerpos en cuartos esperando a ser cremados.

Desde esa noche se realizaron indagatorias de la Coespris y la Fiscalía de Distrito Zona Norte, y aunque no se encontró ningún hecho que pueda ser considerado delito, pues se trataba de cuerpos entregados a tres funerarias para su cremación, sí se observaron fallas en el manejo de los cuerpos, que aún son valoradas por la Comisión para una posible sanción.

“Pensamos lo peor (al momento del reporte inicial)”, dijo Carlos Manuel Salas, titular de la Fiscalía regional, pero posteriormente se descubrió que los cuerpos no tenían huellas de violencia, tenían tratamiento funerario y se contaba con los registros para su manejo.

“El manejo contraviene la normatividad vigente para la disposición de cuerpos y cadáveres. Obviamente, la parte del aseguramiento que se hace del establecimiento, se abre un proceso administrativo para que, de acuerdo al número de observaciones o de irregularidades que encontremos, se genere una multa, una sanción de tipo económico”, afirmó Carlos Tarín, titular de Coespris.

Javier Sánchez Herrera, director de Servicios Periciales de la Fiscalía General del Estado, señaló en rueda de prensa que “todos los cuerpos que encontramos se encuentran en buen estado”.

Se trata de cuerpos de personas que tuvieron muertes por causas naturales, afirmó Salas, por las que ya se había dado una de las dos mil 160 autorizaciones que ha habido en el año para cremar los restos.

Sánchez Herrera añadió que debido a las condiciones de los cuerpos se podía estimar, sin haber entrado en el estudio de los cuerpos, que podían tener hasta dos meses en el lugar, aunque el fiscal general del estado, César Jáuregui, afirmó que “es muy probable que sean de máximo dos años para acá”.

Pese a cómo fueron hallados los cuerpos, la cantidad y el tiempo que posiblemente llevan ahí, para Salas y para Jáuregui no hay delito qué perseguir, como inhumación clandestina, o delitos contra el respeto de los cadáveres.

Oficialmente, la Fiscalía no ofreció información de manera pública sobre las funerarias involucradas, la cantidad precisa y características demográficas de las víctimas, ni sus identidades.

Aunque existe una persona detenida por los hechos, José A., hermano de Luis A., quien es dueño del lugar y de dos de las tres funerarias presuntamente relacionadas con el crematorio (Luz Divina y Amor Eterno). Él fue aprehendido, según Salas, por supuesta desobediencia y resistencia de particulares, “pero nos está colaborando”.