Chihuahua.- De presentarse lluvias durante este mes que repoblaran de pasto los ranchos, reduciría la necesidad de los productores de vender el ganado en el mercado nacional ante el cierre de la frontera a la exportación o al menos, dejarían de alimentar los animales con pastura, lo que aligeraría la carga económica, sostuvo Ricardo Terrazas Rubio, presidente de la Asociación Ganadera Local de Chihuahua.
Expuso el representante ganadero que sin una fecha para levantar la suspensión de las exportaciones de ganado mexicano a Estados Unidos por el gusano barrenador, cada vez más productores comercializan su ganado en México, lo que se refleja en los trámites para movilizar los animales.
Tan sólo en el Centro Expedidor de Certificados para Movilización de Ganado de la Asociación Ganadera Local de Chihuahua, precisó, los trámites pasaron de 12 al día a alrededor de 38, que se suman a los que realizan los otros dos centros expedidores de pases ubicados en Cuauhtémoc y en las instalaciones de la Unión Ganadera Regional de Chihuahua (UGRCh).
Indicó que la comercialización es principalmente de becerros.
“Hay una necesidad de vender el ganado en el mercado nacional porque los productores ya no aguantan dándole pastura por lo costoso”, dijo.
Por ello, reiteró que la presencia de lluvias mejoraría el panorama para el sector, aunque, reconoció, que al estar los terrenos muy talados el pasto saldría desde cero, proceso que lleva de 21 a 30 días, pues no es la misma mata la que empieza a reverdecer.
En cuanto a la reanudación de las exportaciones de ganado en pie, señaló que la noticia que se tiene es que el próximo 16 de junio una comisión técnica del Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA) revisará los avances en los trabajados para contener el avance del gusano barrenador en el sur del país.
El presidente de la UGRCh, Álvaro Bustillos Fuentes señaló anteriormente que con el segundo cierre de la frontera, dejaron de exportarse diariamente cinco mil 700 cabezas de ganado, que con un valor por alrededor de dos mil dólares por cabeza, suman más de 150 millones de dólares de comercio que se han pausado.
Expuso que vender en el mercado nacional representa una diferencia en costo oportunidad de comercializar a Estados Unidos de entre 400 y 450 dólares por ejemplar.
El secretario de Desarrollo Rural del Estado, Mauro Parada, señaló que los ganaderos de la entidad gastan cerca de 21 millones de pesos diarios por la alimentación de 120 mil cabezas que han quedado varadas tras el cierre a la exportación mexicana.
El funcionario estatal explicó que cada ejemplar consume el 7 por ciento de su peso en pastura y granos, lo que significa que una res de 500 kilos requiere 30 kilos de comida, que puede costar alrededor de 180 pesos.
