Lenna Frances Cooper es la creadora de la famosa frase: “El desayuno es la comida más importante del día”. Cooper, una destacada de su época, en 1917 popularizó esta idea en una revista de salud y dieta saludable, defendiendo que después de pasar unas siete u ocho horas durmiendo, es imprescindible hacer la primera comida del día priorizando una dieta saludable y equilibrada. Aunque esta afirmación ha generado debates en la actualidad, la mayoría de los dietistas y nutricionistas coinciden en que desayunar tiene muchos beneficios para la salud y para el funcionamiento óptimo del cuerpo durante el resto del día.

Desayunar es, o debe ser, la prioridad de todo ser humano, no solo porque sea la primera actividad del día; sino también porque somos lo que comemos y es importante llevar una dieta saludable para empezar el día con energía. Además, el desayuno es ese momento de relajación y paz mental que todo el mundo comparte consigo mismo y eso debería ser intocable ya sea un lunes, un sábado o un domingo.

Muchos psicólogos afirman que el desayuno es el momento perfecto para que las personas conecten con el mundo en el nuevo día, siendo un momento seguro donde disfrutar de una buena revista, el nuevo capítulo del podcast o simplemente disfrutar de las tragaperras con un buen café antes de empezar el día. Si el desayuno es la comida más importante del día, no es de extrañar que deba ser también la combinación de alimentos más saludables y deliciosos, porque del desayuno dependerá la energía y el optimismo con el que se afronte el resto del día.

Qué beneficios tiene desayunar

La sociedad vive inmersa en la era de la inmediatez, envuelta en correos de última hora, mensajes de alerta, llamadas de emergencia y horarios que marcan el devenir del día sin, a veces, tener en cuenta los tiempos y necesidades de las personas. Siempre hay un horario para el metro, para el autobús, para la salida de la autovía, para llegar al trabajo, para ir a la clase de pádel, incluso un tiempo límite para no quedarse fuera de la clase de body pump del gimnasio.

Estos horarios nunca cesan, pero a veces apenas queda tiempo útil para descansar y disfrutar de algo tan básico como el desayuno. En ocasiones, el desayuno es una comida imposible de llevar a cabo entre semana y se deja para los fines de semana, optando por un snack saludable en la jornada laboral; pero eso no sustituye un buen desayuno.

El desayuno está pensado para ser esa comida que ayuda a las personas a alcanzar un perfil nutricional óptimo y tiene un papel crucial en el balance energético del individuo. Por eso es muy importante saber qué alimentos son los más recomendados para el desayuno y cómo combinarlos con ingredientes sabrosos sin caer en el cansancio de comer todos los días lo mismo. El objetivo es darle al cuerpo los nutrientes que necesita de una manera saludable para que tenga la suficiente energía como para superar con creces todo lo que se presente en el día.

Incluso hay estudios que confirman que quienes tienen como hábito desayunar antes de salir de casa y empezar la jornada laboral desarrollan una mayor capacidad cognitiva y de concentración, algo muy beneficioso también para el estudio y la optimización del tiempo invertido en cada tarea.

¿La hora de oro del desayuno?

No hay ninguna norma escrita ni ningún estudio que especifique una hora determinada para que el desayuno sea más beneficioso para el cuerpo. Pero lo que sí se ha comprobado es que los niveles de energía y nutrientes asimilados en el desayuno son mayores cuando se espera a desayunar una hora después de despertarse.

Ideas de desayunos deliciosos y rápidos de hacer en casa

¿Quién no se ha despertado un día soñando con una tostada de aguacate, tomate, huevo poché y pavo? O en su defecto, unas tortitas con mermelada y mucho cacao. Pues ambas opciones son posibles de incluir en el día a día, si se hace de manera consciente y teniendo en cuenta los nutrientes e hidratos de cada alimento.

El secreto no está en conseguir grandes platos elaborados, sino en encontrar varias opciones rápidas, sencillas y saludables que te hagan querer desayunar incluso antes de abrir los ojos. Cuando se habla de hacer un desayuno nutritivo se habla de alimentos, no sirve desayunar un café o un vaso de leche mientras te pones las zapatillas y sales casi de casa. El desayuno merece un tiempo especial dedicado a él.

Tostadas

Siempre existe ese debate no escrito sobre si es bueno o no comer pan o si se debe evitar cuando se quiere llevar a cabo una dieta equilibrada. No hay una respuesta correcta, porque todo depende del objetivo de cada persona y de sus gustos. Un desayuno saludable no va de eliminar alimentos deliciosos, sino de saber en qué cantidad ingerirlos. Por tanto, el pan es una fuente de energía rápida y sostenida llena de fibra, vitaminas del grupo B y minerales como magnesio, potasio y zinc.

Tostada con huevo y aguacate

Por eso, una excelente idea es desayunar tostadas con huevo y aguacate. En los últimos años, comer huevo a primera hora del día se ha convertido en una opción ideal por su alto contenido en proteínas y los beneficios reales de desayunar huevo a diario. Una idea es añadirle aguacate, la fruta verde que lleva varios años estando de moda y que además de estar riquísima y aportar mucho sabor, es muy buena para la salud.

Tostada con tomate e ibéricos

Otra opción de tostada es con tomate rallado, algún tipo de ibérico y un chorreón de aceite de oliva. Ideal para empezar el día con mucha energía y una comida que no deja indiferente a nadie.

Bowl de leche y avena

Para los amantes del dulce, una opción muy saludable es preparar un bowl de leche y avena que se puede acompañar de un poco de miel, nueces o mermelada sin azúcar para darle ese toque dulce pero sano.