En un cierre más digno de la UFC que de un partido de futbol, Estados Unidos venció 2-1 a Paraguay en juego de preparación rumbo a la Copa del Mundo.

Corría el minuto 90'+1' cuando el paraguayo Gustavo Gómez quiso reanudar rápido en un saque de banda, pero Alex Freeman no le dio el balón y pelearon por él cual si fueran niños chiquitos.

Los suplentes de ambos equipos se metieron a la gresca. El estadounidense Miles Robinson tenía ánimos de pelea, pero poco pudo hacer porque un paraguayo lo ahorcó, por la espalda.

El mediocampista Sebastian Berhalter incluso fue dar al suelo. Miles Robinson incluso quería pelear con el técnico rival Gustavo Alfaro.

Por increíble que parezca, el único expulsado fue el defensa Omar Alderete, quien el martes no podrá jugar contra México.

Y llovieron golpes y patadas, a diferencia de otros conatos de bronca en las que los futbolistas apenas se rasguñan.

Estados Unidos también supo competir en el plano deportivo, ya que ha ganado partidos que aligeran la presión sobre el técnico Mauricio Pochettino.

El cuadro de las barras y las estrellas se adelantó en el marcador con gol de Gio Reyna apenas al cuarto minuto, pero muy rápido empató Paraguay con el tanto de Alex Arce, a pase de Miguel Almirón, al décimo minuto.

No había un claro dominador. La diferencia la marcó el ímpetu de Diego Luna, cuya presión provocó el error del paraguayo Juan José Cáceres, jugada que culminó en el pase de Gio Reyna a Folarin Balogun, para el cuarto partido sin derrota.

Todavía Ricardo Pepi se dio el lujo de fallar un gol cantado, ya con el portero vencido, pero en el que una pésima recepción y su lentitud al definir permitieron la reacción de Gómez.

El martes, Paraguay encara a México.