Poco después de que Will Stone y su esposa, Brittany, se casaran en 2021, comenzaron a intentar tener un bebé. Pero los primeros intentos no dieron resultado, y al año siguiente se sometieron a pruebas de fertilidad.

Los resultados de la Sra. Stone fueron normales. Pero los del Sr. Stone fueron más decepcionantes.

Su recuento de espermatozoides era de aproximadamente 2 millones por mililitro, muy por debajo del umbral de 10 millones que su médico le dijo que era óptimo para que la pareja intentara la inseminación intrauterina (IIU). Fue remitido a un urólogo, quien le preguntó qué medicamentos estaba tomando.

Cuando el señor Stone, analista de datos en Austin, Texas, mencionó que tomaba una dosis de 1 miligramo de finasterida, una pastilla diaria para la caída del cabello, el urólogo lo interrumpió.

“Me dijo que dejara de tomarlo inmediatamente”, dijo el señor Stone, que ahora tiene 32 años.

La finasterida, a veces comercializada como Propecia, es el medicamento con receta más utilizado para la calvicie masculina. Según se informa, las recetas se han triplicado en los últimos años, paralelamente al auge de las empresas de telemedicina que ofrecen servicios directamente al consumidor, muy populares entre los hombres jóvenes.

Para muchos, el medicamento no presenta problemas y puede brindar una renovada confianza, pero sí tiene efectos secundarios. El Sr. Stone sabía que existía una pequeña posibilidad de disminución de la libido y disfunción eréctil (entre el 1 y el 2 por ciento), pero desconocía que el fármaco pudiera estar relacionado con sus problemas de fertilidad.

La finasterida se prescribe en dosis más altas para tratar la hiperplasia prostática benigna y se sabe que afecta levemente el recuento de espermatozoides . Sin embargo, el Dr. James Kashanian, urólogo y director de salud sexual masculina en Weill Cornell Medicine, afirmó que el fármaco también ha afectado significativamente la calidad del esperma de algunos pacientes, incluso a 1 miligramo , la dosis que se suele prescribir para la alopecia.

A diferencia de otros efectos secundarios del fármaco, no está claro con qué frecuencia disminuye el recuento de espermatozoides, y gran parte de la información disponible es anecdótica. Si bien algunos médicos afirman que puede ser un problema importante, sobre todo entre los hombres que ya tienen problemas de fertilidad, otros sostienen que su impacto es relativamente menor.

Sin embargo, muchos hombres jóvenes desconocen los posibles riesgos, afirmó la Dra. Mary Samplaski, uróloga y exdirectora de infertilidad masculina de la Escuela de Medicina Keck de la Universidad del Sur de California.

Al señor Stone le habían recetado finasterida para la caída del cabello a través de la empresa de telemedicina Hims & Hers. Un vicepresidente sénior de la compañía afirmó que esta proporciona información sobre la finasterida cuando se la receta a los pacientes e incluye una advertencia en su sitio web sobre la infertilidad y la baja calidad del esperma.

En la mayoría de los casos, los problemas de fertilidad parecen revertirse a los pocos meses de suspender la medicación y no hay evidencia de que cause defectos congénitos. En el caso del Sr. Stone, dejó de tomarla el mismo día que se lo indicó su urólogo. Cuando se realizó una nueva prueba 10 semanas después, su recuento de espermatozoides había aumentado a 250 millones por mililitro, un incremento de 125 veces.

¿Un "anticonceptivo masculino"?

En 1999, el primer estudio revisado por pares que analizó la finasterida y la cantidad de esperma no encontró efectos. (Los investigadores recibieron financiación de la farmacéutica Merck & Co.). Sin embargo, un pequeño estudio de 2013, dirigido por el Dr. Samplaski, se centró específicamente en 27 hombres con problemas de infertilidad que tomaban finasterida. Los investigadores les pidieron que dejaran de tomar el medicamento durante tres meses, el tiempo que suele tardar en formarse una nueva población de espermatozoides. Cuando se les realizaron nuevas pruebas tras dejar la finasterida, los hombres registraron un aumento promedio de 11 veces en el recuento de espermatozoides.

Los investigadores sospechan que la disminución en el recuento de espermatozoides se debe a que el medicamento puede alterar el equilibrio hormonal del cuerpo, explicó el Dr. Scott Lundy, director del programa de urología de la Clínica Cleveland. Esto se produce al suprimir la conversión de testosterona en dihidrotestosterona (DHT), la cual se ha relacionado con la calvicie.

En algunas personas, la alteración de las proporciones hormonales puede provocar problemas de fertilidad. «Mucha gente desconoce que la testosterona es un anticonceptivo masculino», afirmó el Dr. Kirk Lo, urólogo del Hospital Mount Sinai de Toronto, quien colaboró ​​en el estudio con el Dr. Samplaski.

Sin embargo, existen muy pocos estudios de alta calidad que analicen la relación entre la finasterida y el recuento de espermatozoides, y no todos los médicos la consideran un factor particularmente común en los problemas de fertilidad masculina. El Dr. Kian Asanad, director del Centro de Fertilidad y Salud Sexual Masculina de la USC, afirmó que menciona los posibles efectos de la finasterida en la fertilidad a sus pacientes cuando es pertinente, pero que no recuerda ningún caso en el que la suspensión de la finasterida haya resuelto los problemas de fertilidad de un paciente por sí sola.

“No creo que sea tan común como pensamos, pero creo que es algo que definitivamente tenemos en cuenta como especialistas en fertilidad”, dijo el Dr. Asanad.

En Estados Unidos, el Dr. Kashanian dijo que en los últimos años ha tenido más conversaciones sobre finasterida, ya que cada vez más hombres acuden a él en busca de tratamiento para la infertilidad.

El Dr. Marc Goldstein, jefe de cirugía de medicina reproductiva masculina en Weill Cornell Medicine, coincidió y afirmó que, tras explicar los riesgos de tomar finasterida al intentar concebir, algunos pacientes optan por continuar con el tratamiento. «La vanidad es lo que manda», declaró.

Pero otros, como el Sr. Stone, están encantados de dejar el tratamiento. Tras recuperarse el recuento de espermatozoides, el año pasado él y su esposa tuvieron un niño sano. No tiene previsto volver a tomar finasterida próximamente.

“Con gusto habría perdido hasta el último pelo de mi cabeza con tal de tener el hijo que tenemos ahora”, dijo.