Chilpancingo, México.- Luego de siete años, autoridades de Guerrero entregaron a familia el cuerpo de Damián Ángel Rodríguez, secuestrado y asesinado en la comunidad de Amojileca, en Chilpancingo.
Los tres hijos de la víctima finalmente pudieron darle sepultura la tarde de este jueves 15 de mayo, después de que Brayan Rodríguez Jiménez, uno de los tres hermanos, exigió a la Fiscalía General del Estado (FGE) la entrega de los cuerpos de sus padres, asesinados en distintas épocas.
El cuerpo de Damián Ángel se encontraba en las instalaciones de la Semefo, en la capital guerrerense, desde noviembre de 2018, tras ser hallado en una fosa clandestina tres días después de ser sacado a la fuerza de su domicilio por un grupo de criminales frente a sus hijos, cuando los jóvenes aún eran menores de edad. Pero no fue hasta principios del pasado mes de mayo que la Fiscalía del Estado informó a Brayan que las pruebas genéticas habían resultado positivas."La Fiscalía tardó mucho en identificar y entregar a sus hijos el cadáver de su papá, porque se tardaron mucho tiempo en interponer la denuncia porque tienen mucho miedo, ya que ellos presenciaron cuando lo golpearon y se lo llevaron por la fuerza varios hombres armados", dijo Gema Antúnez Flores, directora del colectivo "María Herrera", quien da acompañamiento a los muchachos.
"Todo eso lo presenciaron sus hijos que en ese entonces, dos de ellos eran niños, y el otro adolescente, y pues todavía tienen mucho miedo por el trauma que vivieron y además temen que les puedan hacer daño", señaló la activista. La Fiscalía local contaba con el ADN de los hijos de Damián Ángel desde marzo de 2024, luego que en 2019 otra tragedia azotó a la familia con el asesinato de su madre, Marla Jiménez Carachure, hallada en una fosa clandestina en el parque El Veladero, en Acapulco. La madre fue privada de su libertad por hombres armados cuando se dirigía en su camioneta junto con tres compañeros a realizar un trámite en las oficinas del ISSSTE en el puerto turístico. En marzo de ese año, durante una búsqueda realizada por integrantes de un colectivo de Acapulco, hallaron restos humanos en varias fosas clandestinas en El Veladero. Por la confronta genética se confirmó que una de las víctimas era la profesora Marla Jiménez, madre de Brayan. Sin embargo, hasta ahora no han recibido el cadáver de su madre, pese a que aseguran haber cumplido el trámite administrativo y la confronta genética. Gema Antúnez dijo que la recepción del cadáver de Marla Jiménez se complicó debido a que sus restos fueron trasladados a una unidad forense de la Ciudad de México desde octubre del 2024. "Desconocemos los motivos de que se hayan llevado los restos de la profesora desaparecida e iremos la próxima semana a la Ciudad de México para hablar con las autoridades de la Fiscalía General de la República", señaló la presidenta del colectivo "María Herrera". Marla Jiménez daba clases en una escuela en Tlacotepec, cabecera del municipio de Heliodoro Castillo. Los tres profesores que viajaban con ella a Acapulco siguen desaparecidos. "Vamos a aguantar un poco para que el cadáver de la profesora sea entregado a sus hijos, hay que darle una pausa a los muchachos para que el doble duelo no les afecte mucho", expresó Antúnez Flores. Brayan y sus hermanos dieron el último adiós a su padre en el panteón municipal ubicado al norte de Chilpancingo.