Los cuerpos fueron encontrados apilados a un costado del Libramiento Oriente. En el recuadro Fabián Alberto Ramos Torres, uno de los conductores desparecidos.
Los cinco conductores de plataforma, cuatro hombres y una mujer, desaparecidos desde el 30 de mayo pasado, fueron torturados y asesinados presumiblemente en Ojinaga; sus cadáveres fueron encontrados ayer a un costado del Libramiento Oriente, a la altura del kilómetro 25 en el sentido sur a norte.
Fuentes extraoficiales de la Fiscalía General del Estado (FGE), confirmaron la identidad de los cuerpos encontrados ayer alrededor de las siete y media de la mañana, luego de que conductores que transitaban por ese tramo carretero llamaron al 911 para reportar el hallazgo.
Las pruebas periciales preliminares establecieron que las víctimas son quienes en vida respondían a los nombres de Francisco Iván Flores Hernández, de 31 años de edad; Fabián Alberto Ramos Torres, de 38 años; Abigael Ramos González y su hijo Abigael Ramos Torres, de 62 y 31 años de edad, respectivamente, además de Sandra Patricia Saláis Calzadíaz, de 50 años de edad.
La identificación, aunque las pruebas no han concluido en su totalidad, fue posible debido a los tatuajes que tenía una de las víctimas, característica que había sido establecida desde la denuncia de desaparición de la semana pasada.
Según las primeras investigaciones, los cinco cadáveres fueron llevados a ese lugar en un camión de volteo de los conocidos como dompes o en otro de doble rodada, presunción acorde con las huellas de llantas encontradas en el lugar de los hechos.
La información no fue oficializada ayer por la instancia, pero de acuerdo con el personal investigador estatal, las víctimas se dedicaban al transporte de personas entre Ojinaga y Chihuahua, incluso migrantes que se organizaban en grupos para llegar a la frontera.
Por la ubicación de uno de los vehículos de los conductores de la plataforma Didi mediante el geoposicionador, en la zona conocida como Álamo Chapo, a 29 km de Ojinaga, se presume que fueron “levantados” en esa ciudad, donde posiblemente los mantuvieron cautivos, con vida y bajo tortura por varios días.
Además, por las condiciones en que fueron encontrados los cadáveres, habían sido enterrados previamente en otro lugar, pero por alguna razón fueron desenterrados y trasladados alrededor de 270 kilómetros, para ser abandonados dentro de la capital.
El personal investigador de la Fiscalía Zona Centro (FZC) adjudicó el crimen a un grupo criminal con amplia presencia en esa ciudad fronteriza que, por el impacto que ocasionó la desaparición de los conductores, decidió deshacerse de los cuerpos lejos del lugar donde habían sido privados de la libertad y asesinados.
Denuncias de desaparición
Desde el pasado sábado primero de junio, la Fiscalía Zona Centro había dado a conocer que continuaba con las investigaciones para localizar a los choferes de plataforma digital desaparecidos en Ojinaga. Los reportes de desaparición son seis, pero los cinco presumiblemente hallados sin vida corresponden a una misma fecha.
Francisco Iván Flores Hernández, de 31 años, era originario de la capital del estado, como señas particulares tiene un tatuaje en el antebrazo derecho la figura de Anubis y una cicatriz pequeña en la frente.
La última vez que se tuvo conocimiento de su paradero fue el pasado jueves 30 de mayo, cuando reportó a su familia que se encontraba en Ojinaga, aproximadamente a las 16:00 horas, y posteriormente ya no respondió su teléfono.
Fabián Alberto Ramos Torres, de 38 años, también originario de la ciudad de
Chihuahua, quien había viajado a esa frontera. En este caso, él tiene como señas particulares una cicatriz en la pierna izquierda, un tatuaje en el brazo izquierdo con dibujo de una Catrina, un tatuaje en el brazo izquierdo de unas manos sosteniendo un rosario y otro tatuaje en la pierna izquierda con la figura de San Judas Tadeo. Al salir de su casa vestía un pantalón de mezclilla color azul, una playera color gris y botas de trabajo color beige.
La pesquisa refiere que el último día que se tuvo conocimiento del paradero de Fabián fue el 30 de mayo, al estar en la ciudad de Ojinaga.
Otra de las personas desaparecidas es Abigael Ramos González, de 62 años, oriundo de Chihuahua y quien padecía de diabetes e hipertensión arterial, por lo que su familia estaba preocupada por la toma de sus medicamentos cuando reportó la desaparición.
Él vestía una camisa a cuadros color guinda, un pantalón de mezclilla azul y tenis rojos. También su hijo Abigael Ramos Torres, de 33 años, fue reportado como desaparecido en Ojinaga.
Además, fue reportada como ausente Sandra Patricia Saláis Calzadíaz, de 50 años, quien nació en Casas Grandes, Chihuahua, y fue vista por última vez en un autolavado en la ciudad de Ojinaga.
Previamente, el domingo 26 de mayo, desapareció Jesús María Acevez Domínguez, de 48 años, quien fue visto por última vez en el trayecto de Chihuahua a Ojinaga, pero de él no se han tenido noticias, por lo que continúa su búsqueda por familiares y las autoridades, quienes solicitaron el apoyo de la ciudadanía para dar información que conduzca a su paradero, para lo cual pueden comunicarse al número de emergencias 911 y al 089 de denuncia anónima.