Chihuahua.- Chihuahua enfrenta en 2025 otro año de lucha contra la rickettsia, enfermedad bacteriana transmitida por garrapatas que mantiene una alarmante tasa de mortalidad del 80% cuando no se trata oportunamente. Los últimos reportes oficiales registran 17 casos confirmados y 7 defunciones, cifras que preocupan a los especialistas pues apenas comienza la temporada de mayor riesgo.
El doctor Luis García, médico internista con amplia experiencia en el tema, denuncia la falta de acciones oportunas: "Las autoridades actúan cuando el problema ya está avanzado. Las campañas preventivas llegan tarde, generalmente cuando ya tenemos más de diez muertos". La rickettsia se ha convertido en un problema endémico del estado, con un promedio histórico que oscila entre 25 y 30 muertes anuales durante los meses de calor.
Aunque se reporta una disminución del 32% en comparación con 2024, el especialista advierte que este dato no refleja una mejora real. "En epidemiología no podemos basarnos en comparaciones anuales. Para evaluar adecuadamente el impacto de las medidas necesitamos analizar series de cinco años como mínimo", explica García, quien insiste en que las estrategias deben ser permanentes y no reactivas.
La distribución geográfica muestra que Chihuahua capital concentra el mayor número de casos (9 contagios y 5 muertes), seguido por Ciudad Juárez (5 casos y 2 fallecimientos) y Nuevo Casas Grandes (3 casos). Las víctimas abarcan desde niños de 5 años hasta adultos de 64, ningún grupo de edad está exento de riesgo.
El diagnóstico temprano sigue siendo el principal desafío. Los síntomas iniciales -fiebre muy alta y malestar general intenso- suelen confundirse con enfermedades comunes como el resfrío. "El tratamiento solo es efectivo si se administra en los primeros cinco días. Después de ese periodo, las posibilidades de sobrevivir disminuyen drásticamente", advierte el médico.
Entre los factores que agravan la situación, el especialista señala la proliferación de tianguis con ropa usada sin control sanitario, el aumento de perros callejeros que actúan como reservorios y la falta de fumigación en áreas recreativas. A esto se suma la sequía que afecta a la región, limitando el acceso al agua para mantener la higiene adecuada de las mascotas.
Frente a esta crisis, el doctor García hace un llamado urgente a implementar medidas integrales: "Necesitamos acciones coordinadas entre los tres niveles de gobierno, con estrategias permanentes que vayan más allá de campañas temporales". El especialista recomienda a la población estar alerta ante cuadros de fiebre alta repentina, mantener un estricto control de garrapatas en mascotas y desinfectar cuidadosamente toda ropa de segunda mano.
"Llevamos más de una década documentando este problema. Las soluciones existen, lo que falta es voluntad política para implementarlas de manera consistente", concluye el médico, quien advierte que, con los pronósticos de un verano particularmente caluroso, los casos podrían incrementarse significativamente en las próximas semanas si no se toman medidas inmediatas.
La situación actual representa una alerta máxima para las autoridades de salud, quienes enfrentan el desafío de romper este ciclo de negligencia que cada año cobra vidas por una enfermedad que, detectada a tiempo, puede ser tratada efectivamente. El especialista insiste en que la prevención debe ser constante y no solo reactiva cuando ya se tienen víctimas mortales.