Oslo, Noruega.- El Príncipe heredero Haakon de Noruega declaró este martes que la familia real seguirá cumpliendo con sus obligaciones oficiales mientras su hijastro, Marius Borg Hoiby, enfrenta un juicio por graves acusaciones de violencia sexual y doméstica.

Hoiby, de 28 años e hijo de la Princesa heredera Mette-Marit, fue acusado el lunes de 32 delitos penales, entre ellos la violación de cuatro mujeres, violencia doméstica y agresión.

Según la fiscalía, podría enfrentar hasta 10 años de prisión si es hallado culpable de los cargos más graves en un proceso judicial previsto para enero próximo y con una duración estimada de seis semanas.

El abogado del acusado señaló que Hoiby niega los señalamientos de violación y violencia doméstica, aunque planea declararse culpable de algunos cargos menores cuando inicie el juicio.

En sus primeras declaraciones públicas tras conocerse los cargos, Haakon reconoció la dificultad del momento pero subrayó que la institución mantendrá su agenda oficial:

"Seguiremos cumpliendo con nuestras obligaciones lo mejor que podamos, como siempre hacemos. Todos los implicados en este caso probablemente lo encuentren desafiante y difícil", expresó durante la inauguración de una conferencia del sector en Oslo.

La investigación contra Hoiby comenzó en agosto de 2023, luego de que fuera señalado por agredir físicamente a una mujer con la que mantenía una relación.

En aquel entonces, admitió haberla lastimado bajo los efectos de cocaína y alcohol, asegurando que se arrepentía de sus actos.

Aunque forma parte de la vida pública debido a su parentesco, Hoiby no posee título real ni está en la línea de sucesión. Es hermanastro mayor de la Princesa Ingrid Alexandra, segunda en la línea de sucesión al trono tras su padre, el Príncipe Haakon.