Ciudad de México.- Identificada por sus colecciones de joyería elaborada con cristales multicolores, la marca austriaca Swarovski lanzó una línea de piezas extraordinarias, que ya están iluminando México con sus fulgores.
¡Son diamantes logrados en laboratorio!
Sus tallajes únicos se traducen en una lluvia de brillos facetados logrados bajo procesos tecnológicos de última generación. Carla Assumpcao, general manager de Swarovski Latinoamérica explicó a este medio sólo una faceta del proceso para replicar diamantes."Minúsculas semillas de carbono, bajo condiciones de laboratorio, se traducen en capas de carbono que se someten a un tallado de precisión y un pulido perfecto. Proceso que luego de treinta días se traduce en un diamante con todos sus atributos químicos, físicos y ópticos", dijo la directora, aún sorprendida por el hallazgo de las nuevas joyas Swarovski certificadas con excelencia por el Instituto Gemológico Internacional.
Entre rosas blancas y en vitrinas enmarcadas en el impecable ambiente de Casa Lamm lucieron los diamantes engarzados a metales preciosos, que cobraron formas de pendientes estrellados, collares espectaculares y anillos de compromiso tallados con especial claridad. "La marca creada por Daniel Swarovski en 1895 nació con el objetivo de hacer sentir el lujo sobre la piel. Y lo consiguió. Decorar el cuerpo con brillos excepcionales era y es una forma de elogiar la belleza". Las piedras, además, son creadas con energía renovable en su proceso de creación, tallado y pulido y a decir de la directora, reúnen en su individualidad, el color, la claridad, talla y peso de un auténtico diamante. "Con su nuevo lanzamiento, Swarovski vuelve a tocar el mercado de lujo, dadas las cualidades estéticas de piezas que compiten con diamantes reales, sólo que los diamantes Swarovski cuestan un cuarenta por ciento menos a los extraídos de las rocas", dijo la ejecutiva a Reforma.El origen
Diseñada por Giovanna Engelbert, esta selección de piezas invita a transportarse por la maravilla de la Galaxia y los profundos misterios del Cosmos. Por sus estilos las piezas imprimen una forma de belleza atemporal, siempre vigente.


