Preparar la cena navideña para 15 comensales costará este 2025 un promedio de 17 mil 100 pesos, un aumento del 17 por ciento respecto al año anterior que golpeará el presupuesto de las familias.

La cifra resulta del monitoreo de precios realizado por la Alianza Nacional de Pequeños Comerciantes (ANPEC) para conocer cuánto deberán destinar las familias para la celebración de las fiestas decembrinas.

“Conforme nos acercamos a las celebraciones de Navidad y Año Nuevo los hogares mexicanos comienzan a organizarse para preparar las tradicionales comidas y convivios que marcan el cierre del año. Estas cenas, tan esperadas como simbólicas, continúan siendo un desafío importante para el presupuesto familiar, especialmente en un contexto donde el costo de los alimentos y bebidas sigue presionando el bolsillo del consumidor”, comentó Cuauhtémoc Rivera, presidente de ANPEC.

El monitoreo reveló que en lo relativo a las entradas, que comprende botanas variadas como frituras, patés, quesos, aceitunas y complementos similares se estima un gasto de mil 750 pesos.

En el plato fuerte, en el que se considera el tradicional pavo y pierna, acompañados de verduras, puré, pasta y relleno, el desembolso podría alcanzar los 7 mil 150 pesos.

En cuanto a las bebidas, desde refrescos, cerveza, sidra para el brindis, tequila y hielo suman alrededor de 4 mil 550 pesos.

En el menú no puede faltar la clásica ensalada de manzana o pastel como postre, que para 15 comensales tendrá un costo aproximado de mil 450 pesos.

En lo relacionado a la decoración para ambientar la celebración como son gorros, sombreros, lentes divertidos, globos temáticos, luces sencillas, detalles para la mesa como servilletas decoradas o un centro de mesa económico se contempla un gasto de mil 200 pesos.

Para el intercambio, obligado en muchas familias, se consideró un obsequio con un valor de entre 500 y mil pesos.

En contraste, señaló la ANPEC, festejar fuera de casa implica un gasto promedio entre 2 y 5 veces más caro por persona en comparación con organizar una cena casera donde el gasto se comparte, se adapta al presupuesto y permite priorizar lo verdaderamente esencial.