Washington DC, Estados Unidos.- La principal armadora de autos en México, la empresa estadounidense General Motors (GM), presumió este miércoles su cumplimiento con las reglas del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC) y pidió más claridad a la Administración Trump sobre su política arancelaria.
Ante diversos aranceles aplicados a las importaciones de diversos partes del mundo incluyendo México y Canadá, la presidenta de GM, Mary Barra, aseguró que en sus conversaciones de las últimas semanas con la Administración Trump, la compañía ha tratado de explicar lo complejo que es la producción automotriz.
"Diría que las pláticas que he tenido en las últimas semanas han sido muy productivas, porque creo que es hay que comprender que nuestro negocio requiere mucho capital, que nuestras inversiones se realizan en ciclos multi-anuales y que, además, tenemos una cadena de suministro muy compleja", aseguró Barra. "Una de las cosas más importantes que necesitamos en nuestra industria son claridad y consistencia. Porque como dije un vehículo nuevo sale al mercado cada 5 o 6 años. Para realizar esas inversiones... necesito entender cuál es la política", apuntó Barra en un foro del sitio de internet Semafor.Desde el 2 de abril el Presidente Donald Trump instrumentó un 25 por ciento de arancel a todas las importaciones de autos que llegan a EU y en el caso de los autos importados de México y Canadá, también aplica un 25 por ciento de arancel al contenido no estadounidense, algo que contraviene el T-MEC.
Este miércoles, Barra presumió el compromiso con el tratado vigente desde 2020. "Durante la anterior Administración de Trump, cuando se renegoció el T-MEC, nosotros (GM) fuimos una de las...compañías automotrices que se aseguraron de cumplir con el T-MEC", dijo Barra. De acuerdo con las más recientes estadísticas del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), la empresa GM fue en 2024 el principal fabricante de vehículos ligeros en territorio mexicano con más de 889 mil unidades y que representan casi una cuarta parte del total de 4 millones de unidades hechas en el País. Además de los aranceles a la industria automotriz, Trump también implementó un 25 por ciento de arancel a las importaciones de acero y aluminio, lo que también golpea a las automotrices instaladas en México y Canadá que utilizan componentes de dichos metales procedentes de diversas regiones del mundo. La situación arancelaria para las automotrices en México y Canadá podría agravarse a partir del próximo 4 de mayo cuando Trump implemente otro 25 por ciento de arancel a las autopartes importadas a EU; según expertos, dicho arancel podría hacer más caras las intensas cadenas de suministro entre los tres países.